Una labrador canela, fue adoptada en 2012 con tres años
Era la más glotona y traviesa del equipo, no se le escapaba ni un olor, una fantástica detectora de premios. Por una bolita de pienso hacia todo lo que sabia y si le dejas también le encanta dar lametazos. Tenía el record del equipo de aguantar saludando sobre dos patas
Actualmente disfruta de su “jubilación” junto a su amigo Bob y enseñando a “saber estar” a los nuevos del equipo. Está pensando apuntarse a un viaje del IMSERSO.